Un día una bruja y su hija llegaron a refugiarse a un hotel, ya que los caza-brujas las estaban persiguiendo. Pasaron unos meses y las brujas que se llamaban Charlot y Rubí decidieron ir a dar una vuelta por el centro de Madrid, una vez allí decidieron ir a comprar ropa, ya que la suya era muy vieja y fea.
De vuelta al hotel se pararon a mirar una tienda de maletas. Cuando entraron se encontraron una maleta con cierto aire curioso y decidieron comprarla. La maleta venía con una bola de bruja. Cuando llegaron al hotel se dieron cuenta que también contenía un libro de hechizos.
Al día siguiente, cuando lo fueron a devolver el libro, la tienda ya no estaba. De camino a un restaurante se encontraron un gato negro muy chico y como les dio pena decidieron cuidarlo.
Al año siguiente, la niña Rubí fue al colegio, allí se hizo amiga de unas niñas muy curiosas y, hablando de cosas paranormales, se le escapó que era bruja y le enseñó la varita y el gorro de bruja a sus amigas.
Por mala suerte una de esas niñas era hija de unos caza-brujas. Entonces la amiga de Rubí se lo contó a su padre y este marchó directamente a capturarla, pero cuando llegó no había nadie en la habitacion del hotel. Así que se fue y dos años después mi familia y yo alquilamos esa habitación y misteriosamente me encontré una maleta que por curiosidad abrí. ¿Imagináis lo que había dentro de la maleta ?
3 comentarios:
es muy gracioso e intrigante me gusta mucho macarena eres una buena cuenta cuentos
HOla Maca me gusta mucho , adios.
Me encanta es muy bonito y original. Macarena se nota que te has esforsado. Besos Almu.
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